Vale, lo admito. No es el típico Roscón de Reyes o Tortell de Reis, pero hice dos ayer y ya han volado.

Sé lo que le gusta a mi familia y todos han quedado encantados con esta receta "retocada".

Me excuso previamente porque a la que empecéis a leer la receta seguro que decís " ¿y dónde está el Prefermento? ¿y los huevos?

Pero os digo que además de estar buenísimo, la receta es más fácil y rápida.

Ingredientes

Para la Masa

- 250 ml de leche semidesnatada

- 80 gr. de mantequilla 

- 20 gr. de levadura fresca

- 80 gr. de azúcar

- media cucharadita de sal

- 450 gr. de harina de fuerza

Para el Relleno

- un bote de Nocilla

Para pintar el roscón

- azúcar glasé 

- un poco de agua 

- un pozo de zumo de limón

- Chocolate negro de fundir

Preparación con Thermomix

Ponemos la leche y la mantequilla en el vaso 2 minutos velocidad 3 temperatura 37.

Desmenuzamos la levadura y trituramos de nuevo a velocidad 3 durante 1 minuto.

Añadimos el resto de ingredientes de la masa y amasamos 4 minutos a Espiga.

Quitamos el cubilete, pero sin destapar la thermomix, cubrimos con un paño y esperamos 1 hora y media.

Pasado este tiempo la masa ha subido y rebosa por el agujero de cubilete.

Sacamos la masa de la thermomix con las manos bien enharinadas ya que se pega un poco.

La ponemos sobre una superficie lisa, yo utilizo papel de horno sobre el mármol, también bastante enharinada.

Amasamos e intentamos dejar lo más fina posible la masa. 

Dividimos en dos y llenamos de Nocilla ambas partes.

Con cada parte yo he hecho un roscón, si queréis poder hacer uno más grande o dos más pequeños.

Los dejé reposar una hora uno y tres horas el otro (básicamente porque entre uno y otro nos fuimos a la cabalgata y no me dio tiempo a hacer los dos). Pero el resultado fue el mismo, no es necesario tres horas, pero no pasa nada si lo está.

Se ponen a hornear a 180 - 190 grados unos 17 minutos aproximadamente.

Cuando sale del horno hay que pintarlo con el glaseado para que quede brillante. Esto se consigue mezclando azúcar glasé con un poco de agua caliente y un poco de limón. Con un pincel barnizamos todo el roscón.

Yo además, una vez puesto el glaseado, le puse chocolate caliente desecho que luego se seca y queda muy bien.

Este roscón queda muy jugoso, blandito y sobretodo nada seco. Y en mi caso con lo golosos que son mis hijos y lo que les gusta el Chocolate, este les ha gustado mucho más que el "tradicional".

Ah! el Roscón grande se abrió un poco por dos sitios. Y fue por ahí por donde aproveché para meter los dos muñequitos que hacían las veces de Reyes.. No puse ninguna haba. 

Espero que os guste y que os animéis a probarlo el año que viene. Y recordar, compartir!

Hasta pronto! y que vaya bien la vuelta a la rutina.